Son tantas cosas que se pueden escribir del amor. Hay tantos poemas, cuentos, historias, leyendas, libros, incluso grandes gurús parecen tener los mejores consejos de amor.
¿Por qué razón seguimos equivocándonos en muchas de nuestras relaciones? El amor que se siente como verdadero no se ofrece en pedazos. El amor se ofrece de forma íntegra, plena, porque amamos de modo completo, con sinceridad.
Pero hay algo que debemos de tener super claro, no hay que tenerle miedo a la soledad, no hay que verla como una mala opción.
La soledad es la mejor forma de estar en unión con nosotros mismos, es la purificación de esos malos amores.
No dudes que existen amores sabios, amores plenos, que hacen nuestra vida más completa y edificante. Relaciones donde ambos miembros respetan sus espacios, donde es posible el crecimiento individual y a su vez, el de la propia pareja.
¿Qué hace que nos hace encontrarnos con amores tan dañinos? El amor en ocasiones nos ciega y nos arrastra. Alteramos la realidad y nos dejamos llevar, hasta que llega un momento en que en el que (dolorosamente) abrimos los ojos.
Estas son algunas de las razones por las que caemos en relaciones dañinas:
Necesidad de ser reconocidos
Generalmente las personas que tienen baja autoestima son las que se dejan llevar por este tiempo de relaciones, que aunque suenen como la maravilla, es destructiva.
De la noche a la mañana eres el centro de atención de otra persona y nos hace sentir seguros. Reconoce nuestras palabras, es amable y le interesa todo lo que hacemos.
¿Suena bonito, no?
Pero al largo plazo nos damos cuenta que esa persona solo esta llenando un vacío. Nos están reconfortando por un momento, y si alguna vez esa persona falta, nos vamos a querer morir. No es bueno dejar en manos de otro el amor propio ni el reconocimiento. Tu debes de dártelo solo, sin necesidad de estar con nadie.
Miedo a la soledad
Hay quien no “concibe” eso de estar solo. La soledad es un fracaso vital y a su vez, una vergüenza de cara a la propia sociedad.
Para evitar la soledad aguantaran lo que. Aunque la relación sea totalmente dañina, es a la vez como una “zona de confort” para muchos.
Esos viejos estereotipos
Frases como “en el amor, si no se sufre no se ama de verdad”, “el amor es ceder para hacer feliz a la otra persona”, “en esta vida es más fuerte el que más aguanta, el que más sufre…”
En este siglo, deberíamos estar mas conscientes de que la mayor prueba de amor es el propio. Estas hay que romantizar estas etiquetas, porque podemos encontrar roles tradicionales de sumisión y dominación. Debemos tener cuidado con estos conceptos que siguen aún muy presentes en nuestra sociedad.