La gran mayoría de nosotros, nos hemos sentido de esta manera “desilusionado” , sentimos que algo se ha derrumbado y vemos la dura realidad. Todo esto a nuestras grandes expectativas hacia algo.
Más allá de todo lo que podemos llegar a sentir, esta emoción es muy complicada de llevar, se vuelve compleja y preocupante a tal grado que podemos llegar a tener ansiedad o depresión.
Un punto clave es cuando alimentas demasiado a las expectativas, porque esto significa que estas expuesto a una probable decepción grande. Esto no significa que no tengas sueños o deseos. La clave es estar abierto a los cambios, ya sean buenos o “malos”, porque de los dos se puede aprender.
Te sentirás frustrado cuando un plan no funcione o cambie de pronto de camino. La desilusión encierra dos emociones que son complicadas de sobrellevar: la tristeza y el arrepentimiento. Es cuando tenemos las típicas preguntas de ¿Por qué a mi? ¿Por qué confié en esa persona?
Cuando estamos desilusionados en realidad estamos experimentando un sentimiento de perdida.
¿Cómo podemos lidiar con las desilusiones?
Aceptar es el primer y mejor paso. Ya que esta sensación la tendremos muchas veces en nuestra vida. Debemos entender que todo puede cambiar sin previo aviso. Aceptar lo que no puede ser y lo que no puede cambiar.
Si estas pasando por una desilusión, queremos que recordarte que LO MEJOR ESTÁ POR VENIR. Levántate y continua con este camino lleno de piedras y flores.