Sabemos que la atracción visual es importante al ser la primera impresión que tenemos. Pero siempre necesitamos un rasgo que nos enloquezca para cambiar el trato que tenemos con esa persona, y empecemos a buscar algo más que una amistad.
Desgraciadamente nos encontramos en una época donde la superficialidad y estándares de belleza se imponen en las relaciones de pareja. Parece que se preocupan mas por la presentación ante la sociedad que un aspecto que venga desde el corazón.
Cada vez se busca trofeos y esto lo convierte en una relación peligrosa, donde todo terminara con un final caótico.
Quien ha tenido una relación donde la atracción mental persevera, entiende lo poderoso que es una conexión. Nada como crear nuevos escenarios, tener pláticas de todo y nada, estar junto a alguien que nos hace mejores, y nos reta constantemente. No hay silencios incómodos, hay mucho crecimiento, y lecciones.