Aunque sean pequeñas acciones pueden marcar una gran diferencia en el entorno. ¿No te gustaría vivir en un lugar más amable, seguro y respetuoso? ¿Tú que haces para mejorar el mundo?
Aquí te dejamos estas pequeñas y super sencillas acciones que puedes comenzar:
1.- Sonreír. Si algo tan fácil como una sonrisa, esta arma que ayuda a aliviar el estrés y si la compartes podrás contagiar a alguien. Los beneficios de la risa están científicamente comprobados.
2.- Dan los buenos días. Recordar saludar al entrar a trabajo, tu salón de clases a alguna tienda te hará cambiar a una actitud positiva.
3.- Respetar a la naturaleza. No tirar basura o molestar a los animales. Respetar a nuestras mascotas y cuidar los espacios verdes.
También te puede interesar: Alcanzando la felicidad
4.- Adoptan. No compran mascotas, las adoptan. Saben que un animal abandonado tiene mucho amor que dar.
5.- Reciclan. Aparte de evitar contaminar son desechos sobrantes, nos ayuda a necesitar menos recursos, o sea, ahorramos en desperdicio.
6.- Respetan a los ancianos. Las personas con avanzada edad pueden legarse a sentir solas en los últimos años de vida, saben que una compañía los hará sentir mejor.
7.- Son agradecidos. Siempre expresan su aprecio por la ayuda que tienen de los demás.
8.- Ayudan. Ligado al punto anterior, al sentirse agradecidos, les gusta ayudar a otras personas ya sea, ayudando a algún vecino con bolsas del super o escuchando a un amigo.
9.- Son compartidos. Si tienen siempre comparten y no les costará nada. Lo hacen por amor a la ayuda.
10.- Siempre tienen tiempo libre para ser voluntario de una buena causa. Estarán en aun albergue o refugio.
11.- Son positivos. Aunque todos pasemos por situaciones difíciles, ellos siempre tendrán buena energía y aun así ellos se sientan mal, te escucharán y pasarán mucho positivismo.
12.- Están a pendiente de sus amigos. Siempre estarán deseándoles lo mejor.